En Latinoamérica, la banca digital ha ganado terreno rápidamente, transformando la manera en que los consumidores gestionan sus finanzas. Sin embargo, este cambio trae consigo un reto significativo: la creciente amenaza del fraude en transacciones en línea. La digitalización del sector bancario ha generado un entorno propicio para que los delincuentes operen, y los bancos tradicionales de la región se enfrentan a la difícil tarea de proteger a sus clientes y asegurar la integridad de sus servicios.
Brasil, México, Colombia y Argentina encabezan la lista de países con el mayor número de víctimas de fraude bancario, siendo Brasil el más afectado. Una investigación realizada por McKinsey & Company sugiere que la implementación de medidas adecuadas podría generar un ahorro de entre $35 mil millones a $65 mil millones en pérdidas por estafas digitales en la región. Esto subraya la importancia de tomar medidas proactivas para mitigar estos riesgos.
Un estudio reciente de Infobip, reconocida como líder en comunicaciones en la nube por Gartner, revela que el 73% de las transacciones bancarias en la región ya son totalmente digitales. Además, el 70% de los consumidores bancarios en Latinoamérica buscan experiencias personalizadas y seguras. Ante el incremento de interacciones en línea, garantizar la confianza y seguridad en las gestiones bancarias se ha convertido en una prioridad esencial para las instituciones financieras.
Las normas de compliance, que rigen el sector bancario, juegan un papel crucial en la protección de las transacciones financieras. Estas normativas, en constante evolución, exigen que los bancos se adhieran a estrictas directrices para mitigar riesgos como el fraude, el blanqueo de capitales y la violación de datos. El cumplimiento de estas normativas no solo protege a las instituciones, sino también refuerza la confianza del cliente.
En este contexto, RCS Business Messaging emerge como una solución innovadora. “RCS es una plataforma de mensajería diseñada para ofrecer a los clientes una forma segura, interactiva y fiable de comunicarse con sus bancos y realizar transacciones”, explica Fabiola Jiménez, Country Manager de Infobip en México. Además, permite a las instituciones bancarias incorporar logotipos, colores y otros elementos de marca en sus mensajes, asegurando una experiencia de usuario coherente y reconocible. Esto facilita que los clientes verifiquen fácilmente la legitimidad de las comunicaciones, reduciendo el riesgo de fraudes.
Con esta tecnología, los bancos pueden integrar enlaces directos a productos y servicios dentro de los mensajes, permitiendo a los clientes navegar fácilmente hacia las funciones bancarias pertinentes con un solo toque. Este proceso simplificado no solo mejora la experiencia del usuario, sino que también reduce la posibilidad de fraudes relacionados con la banca móvil, como el robo de identidad.
A medida que los consumidores evolucionan y realizan más transacciones a través de sus smartphones, la personalización se vuelve crucial. Según McKinsey, el 73% de los usuarios de banca digital se sienten molestos por el spam genérico de marketing y esperan una experiencia más personalizada. Además, el 75% se frustra al recibir mensajes erróneos o irrelevantes, lo que destaca la necesidad de comunicaciones más precisas y personalizadas.
RCS ofrece funciones interactivas como vídeos y botones clicables, que son especialmente eficaces para involucrar a la Generación Z, un grupo que se espera representará el 27% de la población activa en 2025. “Aprovechando RCS, es posible captar eficazmente a esta generación experta en tecnología, proporcionándoles la información que necesitan en un formato que se ajuste a sus hábitos y preferencias digitales”, concluye Jiménez.