En la primera quincena de septiembre, la inflación anual en México se situó en 4.66%, su nivel más bajo desde mayo, según datos del Inegi. Esta cifra marca la cuarta quincena consecutiva de disminución, tras registrar 5.52% a finales de julio.
A pesar de esta tendencia a la baja, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se vio impulsado por un incremento del 7.92% en energéticos y un 7.15% en frutas y verduras.
Destacan los aumentos en el precio del gas LP, las gasolinas y productos como el limón, además de alimentos vendidos en taquerías y restaurantes. También se observó una subida en servicios escolares y artículos de limpieza.
El alza fue más notable en estados como Baja California, Sinaloa y Sonora. Aunque los analistas de Citibanamex preveían una inflación del 4.71%, el dato real quedó por debajo. Para septiembre completo se proyecta una inflación de 4.72%, con un cierre de año estimado en 4.55%.
