Bertha Alcalde, Fiscal General de Justicia de la Ciudad de México, informó que, en coordinación con la Secretaría de Seguridad Ciudadana, se realizó un operativo en un centro comunitario de la alcaldía Gustavo A. Madero. Un hombre armado, motivado por un despido injustificado ocurrido hace tres años, tomó como rehén a un instructor en un salón de CrossFit dentro del Centro Pastoral de Atención a la Juventud, ubicado en la Iglesia San Jorge, y exigió una indemnización de 600,000 pesos.

Los hechos ocurrieron cuando elementos de la SSC recibieron un reporte por frecuencia de radio sobre la presencia de una persona armada dentro del recinto. Al arribar al lugar, los uniformados observaron a un sujeto apuntando con un arma de fuego a la cabeza de otro hombre. Ante la gravedad del caso, se activaron de inmediato los protocolos correspondientes y se solicitó el apoyo de unidades especializadas, como la Unidad Metropolitana de Operaciones Especiales (UMOE), así como de personal de manejo de crisis y negociación.

En conferencia de prensa, la fiscal Bertha Alcalde detalló que el agresor conocía personalmente a la víctima y alegaba haber sido injustamente reemplazado de sus funciones en el lugar años atrás. Esta situación habría motivado su conducta violenta. La Fiscalía desplegó a personal especializado en crisis y se evacuó a todas las personas ajenas al hecho, con el objetivo de preservar la seguridad en el inmueble.

Durante más de dos horas, se mantuvo un diálogo constante con el agresor. Sin embargo, en un momento de tensión, cuando la víctima intentó tomar agua, el sujeto se tornó más agresivo y realizó dos disparos, hiriendo a un agente negociador desarmado en el cuello y la muñeca izquierda. El lesionado fue trasladado de inmediato a un hospital, donde se reporta fuera de peligro y en recuperación.

Ante la agresión directa y el riesgo inminente para el rehén y el personal, elementos tácticos de la UMOE intervinieron y repelieron la agresión con un disparo que impactó en la región frontal del cráneo del agresor, provocando su fallecimiento. Se confirmó que el sujeto portaba dos armas de fuego.

Gracias a la intervención oportuna de las autoridades, la víctima fue rescatada sin lesiones y recibió atención médica y psicológica en el lugar. La Dirección General de Asuntos Internos abrió una investigación interna, mientras que la Fiscalía de Investigación del Delito de Secuestro integra la carpeta correspondiente, evaluando el uso de la fuerza conforme a los principios de legalidad, necesidad y proporcionalidad.

Bertha Alcalde destacó la coordinación efectiva entre las instituciones, reconoció la valentía del personal actuante, y reafirmó el compromiso de la Fiscalía de atender situaciones de alto riesgo bajo estricto apego a los protocolos de derechos humanos y protección ciudadana.