Este 13 de agosto, el Sistema de Pagos Electrónicos Interbancarios (SPEI) cumple 21 años. Si no te suena, seguro lo has usado: es la red del Banco de México que permite transferir dinero de un banco a otro en cuestión de segundos, sin importar la hora o el día. Funciona las 24 horas, los 365 días del año, y es gratis o muy barato para los usuarios.
Antes de 2004, enviar dinero entre bancos podía tardar días y costar más. Había que esperar horarios de oficina, hacer trámites y pagar comisiones elevadas. Con la llegada del SPEI, todo cambió: Banxico creó una plataforma que valida y liquida la transferencia casi al instante, lo que ha ayudado a reducir el uso de efectivo y facilitar pagos digitales.
En estos 21 años, SPEI ha pasado por varias etapas:
- 2004: Arranca como un sistema rápido para pagos grandes entre bancos.
- 2008-2010: Se abre a pagos de cualquier monto para personas y empresas.
- 2019: Llega CoDi, que usa SPEI para pagar con QR o NFC desde el celular.
- 2023-2024: Se lanza DiMo, para enviar dinero usando solo el número de celular.
Hoy, SPEI procesa más de 5,400 millones de transacciones al año, lo que coloca a México entre los 10 países con más pagos en tiempo real, superando incluso a Reino Unido y Canadá. Según datos de Banxico y ACI Worldwide, el 8.3% de todos los pagos en el país ya se hacen así, y se espera que para 2028 llegue al 12.9%.
El impacto es enorme: en 2023, este sistema ahorró 7,800 millones de dólares a empresas y consumidores, y para 2028 podría aportar 12,800 millones de dólares al PIB. Más del 60% de la población con cuenta bancaria ya lo usa regularmente para mandar o recibir dinero.
En resumen: si alguna vez te han hecho una transferencia “SPEI”, es gracias a una infraestructura tecnológica mexicana que no solo hace tu vida más fácil, sino que ha cambiado para siempre la manera en que se mueve el dinero en el país.