A partir de agosto, las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores) tendrán reglas más estrictas para prevenir el lavado de dinero. La Secretaría de Hacienda informó que estas medidas siguen las recomendaciones del Grupo de Acción Financiera (GAFI), organismo internacional que establece estándares para combatir este delito.
Aunque el riesgo en las Afores es bajo (porque la mayoría del dinero llega a través de aportaciones de las empresas vía Seguro Social y cada trabajador cuenta con un expediente electrónico con huellas, foto e historial laboral), las autoridades buscan reforzar la protección del sistema.
Donde sí podría haber riesgo es en el ahorro voluntario de grandes sumas de dinero. Por eso, se revisará quién deposita, cómo lo hace y con qué frecuencia. Sin embargo, solo 8% de las personas con Afore utiliza esta modalidad.
Tanto Hacienda como la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar) y la Asociación Mexicana de Afores (Amafore) señalan que no se trata de un cambio radical, sino de actualizar reglas antiguas para blindar el dinero de los trabajadores frente a posibles riesgos.