En julio de 2025, las familias mexicanas se mostraron un poco más optimistas que en junio sobre su economía y la del país. El Indicador de Confianza del Consumidor llegó a 45.9 puntos, lo que significa un aumento mensual de 0.4 puntos, según el INEGI y el Banco de México.
Aunque la noticia es positiva porque la confianza mejoró ligeramente, el panorama no es tan alentador si se compara con el año pasado: el indicador está 1.2 puntos por debajo de julio de 2024. Esto refleja que, en general, los consumidores siguen percibiendo un entorno económico menos favorable que hace un año.
Dentro de los aspectos que mejoraron, destaca que las personas sienten más posibilidades para comprar bienes duraderos, como muebles o electrodomésticos (+2.5 puntos), y también creen que hoy es un poco más fácil comprar ropa, zapatos y alimentos (+3.4 puntos). Además, creció el ánimo para planear vacaciones en los próximos 12 meses.
Sin embargo, hay señales de cautela: las expectativas sobre cómo estará la economía del país y de los hogares en un año bajaron, lo que indica cierta desconfianza sobre el futuro. También persiste la preocupación por el empleo y los precios.