Una corte federal en Estados Unidos acaba de devolverle el poder a Donald Trump para aplicar unos aranceles (impuestos a productos importados) que había impuesto durante su presidencia. Esto ocurrió apenas un día después de que otro tribunal había decidido que Trump se había pasado de sus atribuciones al imponer esos aranceles, y había ordenado que se suspendieran de inmediato.
La nueva decisión vino de un tribunal de apelaciones en Washington, que no explicó las razones detrás del fallo, pero sí dijo que quiere escuchar más argumentos: los demandantes (es decir, los que están en contra de los aranceles) tienen hasta el 5 de junio para responder, y el gobierno hasta el 9 de junio.
La situación se volvió más compleja porque el día anterior, otro tribunal —el Tribunal de Comercio Internacional— había sorprendido a todos al declarar que los aranceles de Trump eran excesivos y debían detenerse.
Esa decisión ponía en riesgo la entrada en vigor de los llamados aranceles del “Día de la Liberación”, que afectarían a muchos socios comerciales de Estados Unidos, incluidos Canadá, México y China. Estos aranceles estaban relacionados con una acusación del expresidente Trump de que esos países no estaban haciendo lo suficiente para detener el tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos.
