Para la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), el sector asegurador juega un papel fundamental como facilitador de soluciones que pueden promover la sostenibilidad social y ambiental en respuesta a las vulnerabilidades y riesgos que enfrentan tanto comunidades como ciudades. Su principal ventaja radica en la capacidad de acceder a información detallada y utilizar modelos para monitorear los cambios en eventos naturales, como huracanes e inundaciones, entre otros, lo que le permite sugerir medidas efectivas para mitigar dichos riesgos.
A decir de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), existe una urgencia por convertir a las nuevas economías en modelos sostenibles que contribuyan a mitigar el impacto ambiental derivado de las actividades sociales. A nivel internacional, es reconocido que los seguros tienen una posición única que puede contribuir a este cambio, pues ya se observa que el sector asegurador tiene como principal herramienta las propias pólizas de seguros, que deben tener en cuenta los riesgos climáticos y ambientales del “bien asegurado”. Es por ello por lo que poco a poco habrá que ir internalizando estos elementos a la hora de analizar los riesgos y establecer las condiciones contractuales de las pólizas.
En 2023, Swiss Re Institute reportó 142 catástrofes potencialmente relacionadas con el cambio climático, con daños asegurados de $280 billones de dólares. Se estima un aumento anual de pérdidas entre un 5 y un 7%. Por ejemplo, el terremoto en Turquía y Siria generó pérdidas de $6.2 billones, el 90% de las cuales no estaban aseguradas. Esto resalta la importancia de cerrar brechas en el aseguramiento para una rápida recuperación.
En México, el huracán Otis afectó a Guerrero, con daños asegurados de más de 37 mil millones de pesos. Del total de siniestros, el 61% correspondió a pólizas de seguro de daños y el 39% a seguros de autos.
El sector asegurador ha desembolsado más de 11,274 millones de pesos para indemnizaciones y anticipos, beneficiando a diversos sectores como hoteles, viviendas, Pymes, restaurantes, embarcaciones, infraestructura y autos.
Para reducir daños y pérdidas, es crucial disminuir la vulnerabilidad y exposición mediante el cumplimiento y modernización de códigos de construcción, infraestructura orientada a la reducción de riesgos y evitar asentamientos en zonas propensas a peligros naturales.
El sector asegurador, con sumas aseguradas de 553.6 billones de pesos, es el tercer inversionista institucional más importante del país, representando 17 veces el PIB. Al adoptar estrategias socialmente responsables y sostenibles, contribuye al desarrollo de empresas y proyectos que promueven la transición hacia una economía sostenible. Además, la industria está innovando con productos que incentivan prácticas más sostenibles en respuesta a los desafíos tecnológicos.
Para la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), el sector asegurador desempeña un papel crucial en el desarrollo de una taxonomía verde para sus inversiones, clasificando activos y actividades económicas que contribuyen significativamente a objetivos ambientales. Las aseguradoras son agentes de cambio al utilizar el seguro como herramienta financiera y social para medir, predecir y mitigar riesgos. Su objetivo es cerrar brechas de protección para que más familias y empresas puedan enfrentar los desafíos cambiantes, como el cambio climático, y mejorar el bienestar de las generaciones futuras.
La 33ª Convención de Aseguradores AMIS abordará temas como “Asegurando un mundo en transformación”, los días 9 y 10 de abril en Expo Santa Fe. Regístrate ahora para obtener más información visitando la página del evento en: https://convencionaseguradores.mx/.
33 Convención de Aseguradores AMIS 2024 abordará cambio climático, gestión de riesgo y transformación del cliente del seguro en 2050
Del 9 al 10 de abril, se llevará a cabo la 33 Convención de Aseguradores AMIS 2024, el evento líder en la industria aseguradora que bajo el lema “Asegurando un mundo en transformación”, congregará a más de 1,000 participantes, incluyendo directivos, funcionarios de instituciones aseguradoras, representantes empresariales, académicos, expertos internacionales y funcionarios del Gobierno Federal.
Este espacio de diálogo abordará los retos en protección financiera del país, fomentando reflexiones y acciones para enfrentarlos, donde actualmente el sector asegurador es estratégico para la economía, promueve la estabilidad financiera, contribuye a la continuidad del proceso económico y ayuda a la formación de capital, siendo el tercer inversionista institucional más importante para el país, sólo después de las Afores y de las Sociedades de Inversión, con 1.6 billones de pesos que representan el 5.4% del PIB nacional, en su mayoría colocados en instrumentos gubernamentales.
La 33 Convención de Aseguradores AMIS 2024 se vuelve más importante teniendo en cuenta que en los últimos años se han enfrentado eventos de gran magnitud como la pandemia de Covid-19 y catástrofes naturales como los sismos de 2019 y más recientemente el huracán Otis, que pudieron haber tenido como catalizador el cambio climático, lo cual lo vuelve clave para seguir trabajando en cerrar las brechas de protección del seguro, incrementar la protección financiera en general y la resiliencia de la población mexicana.
Entre los diálogos que se tendrán en la la 33 Convención de Aseguradores AMIS 2024, se analizaran temas como la atención al cambio climático, vislumbrar estrategias para impulsar el aseguramiento inclusivo, e impulsar acciones que al final buscan que los mexicanos tengan una mejor calidad de vida en términos de protección financiera.
El cambio climático sin lugar a duda es uno de los más relevantes en la agenda global. Las afectaciones climáticas pueden ser un factor que incida en los precios de los productos, particularmente de los agropecuarios, estableció el Banco de México en su reporte de política monetaria de diciembre de 2023.
Es bajo este panorama que los retos que enfrenta el país se comienzan a interrelacionar, el cambio climático no sólo es una preocupación de los organismos económicos, también lo es para las aseguradoras pues su misión es lograr la resiliencia ante los fenómenos naturales, por lo tanto, las soluciones deben ser transversales.