En julio de 2024, la inflación en México alcanzó un 5.57 por ciento, el nivel más alto desde mayo de 2023, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Este incremento fue impulsado principalmente por el alza en los precios de frutas y verduras, que registraron un repunte del 23.55 por ciento en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Entre los productos más afectados se encuentran el jitomate, aguacate, naranja y cebolla, cuyos precios se dispararon debido a condiciones climatológicas extremas, como sequías y lluvias intensas, que han impactado negativamente la producción agrícola.
Además del aumento en frutas y verduras, se reportaron alzas en el costo del huevo, carne de cerdo, gas doméstico LP y gasolina Magna, así como en alimentos preparados en establecimientos como restaurantes y taquerías.
A pesar de este escenario, analistas prevén una desaceleración de la inflación para finales de 2024, con una proyección de 4.60 por ciento, mientras que el Banco de México espera alcanzar su meta de tres por ciento hacia finales de 2025.