La Comisión de Quejas del Instituto Nacional Electoral (INE) ha instado a Xóchitl Gálvez, candidata presidencial de la coalición Fuerza y Corazón por México (PAN-PRI-PRD), a abstenerse de emplear el logotipo del árbitro electoral en su propaganda electoral, ya que esto genera confusión entre la ciudadanía respecto a la autenticidad de los mensajes emitidos por dicha autoridad.
En una sesión urgente, los consejeros desestimaron la queja presentada por Morena contra Xóchitl Gálvez, dado que la publicación que provocó la queja, en la que la candidata simulaba espectaculares con una campaña del INE para aclarar que la permanencia de los programas sociales no está sujeta al voto por ningún partido, ha sido eliminada.
Rita Bell López ha manifestado que “aunque la publicación fue eliminada, el daño ya está hecho”, pues sigue siendo difundida en redes sociales. En consecuencia, sugiere que el INE debería prohibir el uso de su imagen en campañas políticas.
La consejera Claudia Zavala, presidenta de la Comisión de Quejas y Denuncias del INE, ha planteado interrogantes sobre si la intención de Xóchitl Gálvez era confundir a la ciudadanía y asociar al INE con su propaganda política, lo cual está prohibido debido a que el logotipo del INE está registrado y su uso indebido podría afectar la contienda electoral.
Asimismo, Zavala ha enfatizado que un actor político no puede beneficiarse electoralmente ni utilizar información política empleando el logotipo de la autoridad electoral. Ha señalado la necesidad de respetar las instituciones y ha expresado su preocupación por la posibilidad de generar confusión entre la ciudadanía.
Ayer, Xóchitl Gálvez difundió imágenes que mostraban espectaculares con frases como “Si alguien te dice que puedes perder los programas sociales. Denúncialos”, “Ningún partido puede quitarte los programas sociales. Son Tuyos”, “Los programas sociales no pertenecen a ningún partido político. Son Tuyos” y “Gane quien gane, los programas sociales se quedarán. Son Tuyos”, acompañadas del logotipo del INE. Esta acción generó descontento entre los consejeros del árbitro electoral, incluida su presidenta, Guadalupe Taddei Zavala.
