Este 2024, Santa Clara conmemora un siglo de trayectoria en México, un hito monumental que evidencia su arraigo y compromiso perdurable con el país y su gente. A lo largo de las décadas, Santa Clara ha sido un pilar fundamental en la generación de empleos, brindando oportunidades a miles de trabajadores y respaldando a comunidades enteras en todo el territorio mexicano.
Desde su establecimiento en 1924, Santa Clara ha trascendido su papel como mera marca de lácteos para convertirse en un referente dentro de la industria alimentaria en México. Llega a la celebración de su centenario como una firma consolidada en los hogares y en el gusto de los consumidores mexicanos. Más que una empresa láctea, Santa Clara es un emblema hidalguense que renueva diariamente su legado como parte integral del ecosistema de la Industria Mexicana de Coca-Cola, tanto en proveeduría como en la fuerza laboral que impulsa la compañía día tras día.
SUS INICIOS
El transcurso de cien años se traduce en una constante innovación, desde la modernización de los procesos industriales hasta la diversificación del portafolio de productos para satisfacer los gustos del consumidor.
Santa Clara, la reconocida marca de lácteos, celebra su centenario de operaciones. Sus humildes inicios se remontan a un pequeño establo con solo 17 vacas, que inicialmente distribuía leche fresca a domicilio en Pachuca, Hidalgo. Con el paso de los años, esta modesta empresa creció hasta convertirse en un verdadero gigante en el sector lácteo, llegando a contar con más de 2,200 cabezas de ganado.
A partir de julio de 2012, la marca Santa Clara pasó a formar parte del portafolio de Coca-Cola, siendo administrada por Jugos del Valle, una de sus subsidiarias. Esta transacción se llevó a cabo en colaboración con el conglomerado internacional de la compañía refresquera y otros ocho socios embotelladores, aunque el monto exacto de la operación no fue revelado.
Desde sus inicios, donde la calidad de la materia prima era primordial, hasta las modernas instalaciones de sus plantas en Pachuca de Soto, Tepotzotlán y Lagos de Moreno, Santa Clara ha mantenido un compromiso constante con México, contribuyendo al crecimiento económico y al desarrollo de la industria láctea y alimentaria en el país. La reciente inversión de $133 millones de dólares en la planta de Lagos de Moreno para aumentar su capacidad de producción en un 30% es un testimonio de este compromiso continuo.
Sin embargo, el verdadero motor de Santa Clara son las personas: los trabajadores que han dedicado su vida a la marca, formando parte de este vasto ecosistema que es la Industria Mexicana de Coca-Cola. Actualmente, Santa Clara genera 3,500 empleos directos y 17,500 indirectos, y entre ellos se cuentan historias de éxito compartido, personas dedicadas a fortalecer el portafolio de productos que incluye desde 5 tipos de leche hasta más de 30 sabores de helados.
Claudia Navarro, Vicepresidenta de Marketing para Coca-Cola en América Latina, considera este centenario como un hito trascendental en la historia tanto de Santa Clara como de México. Para Navarro, esta celebración va más allá del mero legado de la marca, representando también un compromiso continuo con la calidad y una conexión única con los mexicanos.