SEGURO EN 2050.- En la actualidad, los seguros en México ofrecen una amplia gama de productos para proteger diversos aspectos como la salud, la vida, la movilidad y el hogar. Sin embargo, no todos los clientes pueden llegar a ellos debido a limitaciones geográficas y costos elevados.
A decir de Daniella Gurrea Martínez, vicepresidenta de la Asociación Mexicana de Seguros (AMIS), las megatendencias están marcando un camino para el sector asegurador en México. Este se adapta cada vez más a posibles desafíos como el cambio climático y a oportunidades en términos de salud, avances médicos y principalmente al mercado laboral y la tecnología, los cuales están modificando el perfil de los clientes.
Durante su participación en el panel “Megatendencias futuras: el cliente del seguro en 2050” en la 33 Convención de Aseguradores AMIS, titulada “Asegurando un Mundo en Transformación”, Gurrea Martínez explicó que las aseguradoras enfrentan dos desafíos principales para el futuro: la necesidad de contar con personal altamente calificado debido a la integración de tecnología en sus procesos, y la preocupación por aquellos individuos que carecen de acceso a la educación necesaria para adaptarse a estos cambios, lo que podría dejarlos sin oportunidades laborales y sin capacidad para costear las primas de seguros.
En el ámbito de la salud, Gurrea Martínez indicó que los avances significativos en la atención médica y la conciencia sobre la prevención han surgido a raíz del aumento en la expectativa de vida. Por ejemplo, mencionó la secuenciación genética, una tecnología que revela las predisposiciones a enfermedades y permite modificaciones genéticas para prevenirlas, y que tendrá un impacto definitivo en la industria aseguradora.
Por otro lado, Salvador Alonso y Coloca, director general de Seguros Banorte, consideró que el cambio en el sector asegurador no depende únicamente de la tecnología, la inteligencia artificial, el aprendizaje automático o las tecnologías de consumo, sino también de la forma en que el cliente las adopta para tener una nueva forma de valoración y demandar experiencias de consumo más gratificantes y satisfactorias.
Alonso y Coloca puntualizó que, en el futuro, las demandas de los clientes hacia las aseguradoras no solo implicarán un cambio en los productos, sino también una evolución gradual en su oferta y modelo de negocio.
El director general de Seguros Banorte consideró que, ante las demandas digitales de los usuarios de seguros, las compañías deberán desarrollar capacidades cruciales, tales como la protección contra riesgos en tiempo real y la implementación de nuevos instrumentos de apoyo que les permitan ofrecer servicios personalizados de forma inmediata, sin que la cobertura geográfica represente una limitación.
A su vez, Laura Rosado, responsable de Estrategia y Evaluación del Desempeño e Impacto de AXA Emerging Customers destacó tres claves importantes para fortalecer la transformación del sector en miras a un 2050 con mejores oportunidades para los asegurados.
Comentó que la construcción de confianza, es crucial para demostrar que los intereses de las aseguradoras están alineados con los de los clientes. “Construir una relación de confianza es esencial para fomentar la fidelidad del cliente y garantizar su satisfacción a largo plazo”.
Asimismo, declaró que el envejecimiento saludable es algo que el sector asegurador debe considerar, ya que la integración de servicios que promuevan el bienestar en la tercera edad permite comprender mejor los riesgos asociados con la longevidad y ofrece soluciones para reducir costos médicos.Principio del formulario
En relación con la inclusión financiera, Laura Rosado enfatiza que pensar en el futuro del sector asegurador para el año 2050 sin abordar la brecha de protección carece de sentido. Desde esta perspectiva, subraya la necesidad de cerrar la brecha y aprovechar el potencial que representan todos los clientes, incluyendo pequeñas microempresas que aún no están cubiertas por diversas razones.
Al abordar la digitalización, Laura destacó la importancia de comprender cómo la tecnología puede beneficiar a los clientes y cerrar la brecha. Sugiere que el uso de la tecnología y el aprendizaje continuo de información pueden ayudar a identificar y desarrollar productos para atender a segmentos de la población que tradicionalmente no han sido atendidos por la industria aseguradora.
En relación con el cambio climático, Laura Rosado señaló que el papel de la industria del seguro en 2050 implica un cambio en la definición de los seguros climáticos, enfocándose más en el financiamiento de riesgos y desastres climáticos para reducir y mitigar su impacto económico, ecológico y social.
Enfatizó la necesidad de una cooperación multisectorial y multidisciplinaria, así como una colaboración público-privada para abordar eficazmente el cambio climático. Además, destacó la importancia de considerar diferentes capas de riesgo con la participación de poblaciones, el sector público y la comunidad internacional.
¿Y tú, cómo imaginas el seguro en 2050?