La inflación volvió a mostrar movimiento en México: durante la primera mitad de noviembre, los precios subieron 0.47%, según el Inegi. Esto significa que, comparado con el año pasado, todo está 3.61% más caro. Es un dato un poco más alto de lo que esperaban los especialistas y de lo que vimos a finales de octubre.
La inflación “subyacente”, que es la que mide los precios más estables —sin frutas, verduras ni energéticos— apenas subió 0.04% y se mantiene en 4.32% anual, igual que el mes pasado. Para el Banco de México, la meta es que la inflación esté cerca del 3%, así que todavía falta camino para llegar ahí.

