Las lluvias de este año no solo han sido más intensas, también están dejando una factura histórica. Entre enero y octubre de 2025, las aseguradoras en México han pagado 8,004 millones de pesos por daños relacionados con fenómenos hidrometeorológicos, una cantidad que ya supera todo lo que se gastó en 2024.
Solo las precipitaciones registradas entre el 7 y el 11 de octubre dejaron casi 4,500 millones de pesos en pérdidas, de acuerdo con datos de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS). Es decir, en menos de una semana se generó más de la mitad de los costos que normalmente se pagan en un año.
¿Por qué está pasando esto? La AMIS explica dos razones:
- Cada vez hay más casas, autos y negocios asegurados, entonces más personas reportan daños.
- Las lluvias están siendo más fuertes y más irregulares, afectando zonas que antes no tenían este nivel de riesgo.
Durante la baja presión que afectó al Golfo de México en octubre, se registraron 7,134 siniestros con un costo estimado de 4,473 millones de pesos. De todo ese dinero, 85% corresponde a daños en viviendas, comercios e infraestructura pública; el 15% restante fue por autos afectados.
Veracruz fue el estado más golpeado, acumulando el 80% de todos los reportes, seguido por Puebla e Hidalgo. En total, casi 2,900 autos sufrieron daños, y la gran mayoría también estaba en Veracruz.
Norma Alicia Rosas, directora general de la AMIS, subrayó la urgencia de fortalecer la protección patrimonial:
“Las lluvias atípicas generaron daños significativos, y no todos cuentan con un seguro, lo que ralentiza la recuperación económica. El reto es promover la cultura de la previsión”.
El fenómeno refleja una vulnerabilidad creciente. Según el Banco Mundial, 70% de la población mexicana está expuesta a algún tipo de riesgo natural. Y entre 2010 y 2020, la ONU reporta que la cantidad de personas afectadas por desastres aumentó 70%.

