Mientras la inteligencia artificial (IA) redefine la producción y distribución de alimentos en el mundo, México enfrenta su propio rezago estructural: depende del exterior para cuatro de cada diez kilos de maíz que consume, según alertó Beatriz Jacoste, CEO de KM ZERO Food Innovation Hub, durante el ftalks Food Tech Summit LATAM 2025.

“El verdadero progreso no depende solo de la IA, sino de combinar la innovación tecnológica con la sabiduría ancestral que ha cuidado nuestros suelos y comunidades”, advirtió Jacoste.

Durante el Food Tech Summit, la directiva considera que la soberanía alimentaria mexicana debe convertirse en una prioridad nacional, especialmente ante la inestabilidad geopolítica y la concentración tecnológica que marcan al sector.

De acuerdo con Manuel González, socio director de AgFunder, la IA ya capta el 70% del valor de las inversiones de capital riesgo en Estados Unidos y el 58% a nivel global. Solo la infraestructura tecnológica vinculada al sector alcanzará 250 mil millones de dólares este año, y podría superar los 2.9 billones hacia 2028.

En contraste, el agro mexicano aún lucha por acceder a financiamiento, conectividad y herramientas de precisión, en un país que pese a su riqueza gastronómica y diversidad agrícola, mantiene una brecha tecnológica que limita su competitividad.

El foro Food Tech Summit, organizado por KM ZERO, reunió a líderes de Nestlé, Bimbo, Bayer, Deloitte y Bank of America, quienes coincidieron en que la convergencia entre IA, biotecnología y conocimiento local será clave para enfrentar la próxima década alimentaria.