El acceso al agua limpia y segura se ha convertido en una de las principales preocupaciones en América Latina, según el segundo Estudio Watermark de Ecolab, líder mundial en soluciones de sostenibilidad. A pesar de los recientes avances en la gestión del agua, el informe destaca que el 90% de los consumidores latinoamericanos están profundamente preocupados por la situación del agua, y en México, esta cifra asciende al 95%.
Estos números que destaca Ecolab reflejan una creciente ansiedad frente a un futuro donde el recurso más vital para la vida se está volviendo cada vez más escaso.
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) proyecta que la demanda de agua potable en América Latina aumentará un 43% para 2050, una cifra alarmante comparada con otras regiones. Con la crisis climática empeorando y afectando la disponibilidad del agua, el estudio revela que los consumidores están presionando a gobiernos y empresas para que tomen medidas inmediatas.
En México, el 29% de los consumidores responsabiliza al gobierno de proteger este recurso, mientras que también identifican a la agricultura y la industria de alimentos y bebidas como los principales usuarios del agua.
A pesar de la gravedad de la situación, el estudio de Ecolab refleja cierto optimismo en la región. Un 58% de los encuestados considera que ha habido avances en los objetivos de sostenibilidad y clima en el último año, destacando que aún existe esperanza si se toman acciones coordinadas e inmediatas.
En este escenario, el llamado a la acción es claro: la protección del agua no solo es un reto para los gobiernos y empresas, sino también para los consumidores, quienes están dispuestos a pagar más por productos sostenibles. La crisis del agua es inminente, pero con colaboración y responsabilidad, aún es posible mitigar sus efectos devastadores.